La brecha digital y educativa
Variables de un ciclo vicioso
“Maaaaaa... no escucho la profesoraaaaa”.
Se fue el internet otra vez. A pesar de vivir en una zona urbana de Cusco y pagar una prima por tener una velocidad de 40 megas, es común que la velocidad no llegue ni siquiera a 1 mega. A veces, como ahora, la red se cae por completo, haciendo imposible las clases virtuales de mis hijas. Es una experiencia habitual de los peruanos; vivimos con la inestabilidad y el mal servicio de las utilidades más básicas. ¿Cuántas veces te ha pasado que, estando en el banco o una tienda, te dicen “no hay sistema”? Ahora en medio de la crisis de COVID, nuestros trabajos y escuelas han pasado al espacio virtual, y más que nunca el internet es un servicio esencial. La cuarentena ha resaltado más aún la brecha digital que vive nuestro país y las diferencias de acceso entre las zonas urbanas y rurales. Si tenemos mal servicio en Cusco urbano, pagando el paquete premium, ¿Cómo estarán las familias campesinas de las comunidades rurales?

Según una encuesta nacional, realizada en mayo por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP), un 52% de hogares peruanos con niños de edad escolar, dicen que su mayor problema con la educación a distancia es la señal de internet, radio o televisión, aumentando esta cifra al 65% en zonas rurales. Los medios han ejemplificado esta dificultad, mostrando niños trepando los cerros con su radio para captar la señal de las clases Aprendo en casa, el programa educativo a distancia del Ministerio de Educación (MINEDU) por medio de internet, televisión y radio.
En términos de educación en el Perú, ya se sabía mucho antes de la cuarentena que habían brechas profundas entre los logros académicos entre niños rurales y urbanos. Por ejemplo, según el último Resultados de la Evaluación Censal de Estudiantes (ECE) del 2018, sólo un 13% de los niños de zonas rurales lograron un nivel satisfactorio de lectura en 4to de primaria, comparado con un 37.8% en zona urbana, casi tres veces de lo logrado por sus compañeros en zonas rurales. La brecha se vuelve más grave para los de 2ndo de secundaria, donde la diferencia es de 2.9% versus 17.9% de nivel satisfactorio en lectura, ente rural y urbano respectivamente. Ahora con la falta de clases presenciales, ¿cuánto más grande abrirá esta brecha, para el 2020?
La educación no es la única industria afectada profundamente por falta de conectividad, las pequeñas empresas (PYMES), por ejemplo, también dependen del internet para poder comprar, vender, pagar impuestos, etc. En muchas zonas rurales del Perú, la mayoría de los negocios se encuentran en esta categoría de PYMES. Para intentar salvar la economía de la crisis sanitaria, el gobierno se ha enfocado mayormente en ayudar a las empresas del sector privado, formando el programa Reactiva Perú, que hasta el momento ha brindado aproximadamente 25 mil millones de soles en préstamos de bajo intereses y planifica llegar a los 60 mil millones totales de fondos de rescate. Sin embargo, hasta el momento, se ha destinado el 71% a beneficio de las grandes empresas y sólo 3% a las microempresas. Cabe preguntar ¿si se está invirtiendo tanto en las empresas, por qué no invertir en el acceso a internet para todos los peruanos?
Hace aproximadamente diez años, se ha venido desarrollando un programa interesante, que ayuda a llevar internet a las zonas más rurales del mundo, por medio de unos globos aerostáticos. Se trata de un proyecto iniciado por la compañía Google, en ese entonces con el nombre Project X, y que ahora se ha convertido en su propia compañía con el nombre Project Loon. Los globos funcionan a base de energía solar y autorregulan su velocidad y dirección usando las corrientes naturales del aire, como una especie de antena, llevando la señal 4G LTE a las zonas sobre las cuales vuelan. En Perú ya existe un programa trabajando el tema de conectividad, Internet Para Todos, un colaborativo entre Telefónica y Facebook, con fondos del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y el Banco Internacional de Desarrollo (BID); cuyo propósito es conectar todo el país a las redes de telecomunicación. Este programa es responsable de traer los primeros globos Loon a Sudamérica y actualmente están probando esta tecnología en una zona de difícil acceso en Loreto.

Foto: mobile world live
Según un estudio estudiantil de la Universidad Nacional Australiana, sobre la viabilidad del Project Loon para este país, cada globo cuesta aproximadamente $17,870 y lleva un presupuesto de $40,318 por su operación durante cinco años, llevando internet a un área de 1,257km². Dado la naturaleza de la fuente, hay que tener en cuenta que podría haber algunos errores en los números, sin embargo, siendo las únicas cifras disponibles, entretendremos la posibilidad por un momento. El Perú tiene un área total de 1’280,086 km², lo que significa que necesitaríamos 1,018 globos Loon para tener internet en todo el territorio, con un costo total de $59’235,384 o 201’400,306 soles, durante 5 años. Puede parecer una cantidad enorme, pero si consideramos que este monto sólo representa un 0.34% del paquete de rescate total de Reactiva Perú, palidece en comparación. Este ejercicio sugiere, aunque pueda ser inexacto, que el costo de tener internet para todos los peruanos no es tan caro ni tan difícil como se nos ha sugerido. Pregunto, ¿dónde están nuestras prioridades? ¿Por qué no cerrar la brecha digital y así activar la economía y la educación, realmente, para todos?
(Foto de cabecera: Exitosa)
Fuentes:
https://iep.org.pe/wp-content/uploads/2020/05/Informe-OP-Mayo-2020-Educaci%C3%B3n-4.pdf
http://umc.minedu.gob.pe/wp-content/uploads/2018/10/Informe-Nacional-ECE-2018.pdf
https://www.gob.pe/institucion/mef/campa%C3%B1as/1159-reactiva-peru
http://users.cecs.anu.edu.au/~Chris.Browne/student_work/example_work/15_2226_lp_jamesb.pdf